La gran boda

LEE:

“Y oí como la voz de una gran multitud, como el estruendo de muchas aguas, y como la voz de grandes truenos, que decía: ¡Aleluya, porque el Señor nuestro Dios Todopoderoso reina!

Gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado.

Y a ella se le ha concedido que se vista de lino fino, limpio y resplandeciente; porque el lino fino es las acciones justas de los santos.”

Apocalipsis 19.6-8

PIENSA:

Es cierto que el libro de Apocalipsis es un libro que en general, requiere de un estudio serio y prolongado para interpretar diversos pasajes. Sin embargo, existen algunos que nos son mucho más entendibles, es el caso del pasaje que hemos leído.

La Biblia nos muestra que la historia de la redención no se llevó a cabo por una simple orden, por una obligación o por una necesidad, sino que se llevó a cabo porque es una historia de amor, es un deseo que nace en el Señor, de querer rescatar para sí una esposa, de pagar un precio efectivo por ella, y de asegurar todo para que la boda resulte, regalarle un vestido blanco, como dice el verso, de lino fino, limpio y resplandeciente. Debemos nosotros mirar la redención como una historia semejante al de un esposo y una esposa. Y así también, tener esperanza en que lo terrenal, esto visible, algún día acabará y llegará el glorioso día en que se celebrará esta gran boda ¡Aleluya!

ACTUA:

Como miembro de la iglesia, usted es la esposa del Cordero, y su esposo, el Amado, se ha provisto de absolutamente todo para que usted sea partícipe de esta gran fiesta. Por lo tanto, es muy prudente que usted desde ya cuide su vida y se guarde del mal, recuerde que el Señor vendrá a buscar una iglesia (esposa) sin mancha y sin arruga. Prepárese, nos espera una gran fiesta, conserve sus vestidos blancos, no los manche. Y recuerde, que todo lo triste y doloroso, pronto terminará y estaremos para siempre con nuestro amado.

Amén.